Antorchas en el cielo
Las promesas que un día brillaron como antorchas en el cielo, se consumen como si de velas en un candelabro se tratase. Las palabras que viajaron a través de universos arden ahora como cometas en la noche.
Las preguntas que respondimos con sonrisas inocentes se convierten en enigmas consecuentes.
Al mirar atrás es difícil decidir si es mejor olvidar o recordar, si arrepentirse o avanzar.
Yo no estoy, y tú tampoco estás. No vas a volver, ni yo a retroceder.
Las personas desaparecen, pero nunca terminan de desvanecerse. No importa el tiempo que pase, siempre encontraré tu olor en viejas camisas, tu imagen en los espejos, a ti en mí.
Te fuiste, pero sigues aquí, un espectro de
épocas pasadas perdido entre niebla y recuerdos.
Todo termina y sin embargo nada acaba.
Las preguntas que respondimos con sonrisas inocentes se convierten en enigmas consecuentes.
Al mirar atrás es difícil decidir si es mejor olvidar o recordar, si arrepentirse o avanzar.
Yo no estoy, y tú tampoco estás. No vas a volver, ni yo a retroceder.
Las personas desaparecen, pero nunca terminan de desvanecerse. No importa el tiempo que pase, siempre encontraré tu olor en viejas camisas, tu imagen en los espejos, a ti en mí.
Te fuiste, pero sigues aquí, un espectro de
épocas pasadas perdido entre niebla y recuerdos.
Todo termina y sin embargo nada acaba.
Precioso, Carlota. ¡Ya echaba de menos un texto nuevo!
ResponderEliminarPrecioso. Te vuelvo a decir lo que ya te dije en otras ocasiones: No dejes de escribir. El texto es muy emotivo.
ResponderEliminarTienes muchos sentimientos impregnados en dedicación, cuando uno siente con tanta fuerza debe permitirse el lujo de saber que las llamas no se apagan nunca y que existe una persona dentro de tí que tiende a la satisfacción de necesidades filosóficas puras, que dentro de la fuerza de tu sentimiento deben aprovecharse para ver la verdadera grandeza del espíritu humano y romper las ataduras de las voces en vano que deben de morir por una causa grande de valentía y caminar con la exactitud y la lentitud de un sutil cuidado. Un saludo.
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